Tanger, le reve des bruleurs
(Tanger, el sueño de los quemadores)
Leïla Kilani
El aliento que anima el cine de Marruecos está confirmado. Los autores que se activan delante de la escena después del año 2000 están cambiando la situación. Es el caso de Leïla Kilani, quien se encuentra orientada al documental
Sinopsis
En Tánger la frontera es una presencia, se ve, aparece o se esconde alternadamente, pero se siente en todas partes: es el agua. En frente se vislumbra una línea continua: España, la última punta natural de Europa. Los candidatos a la partida clandestina, marroquíes, malís, senegaleses y otros africanos confluyen masivamente y de forma continua en Tánger. Se les llama en el dialecto marroquí “herraguas”, los “quemadores”. El quemador es el que está dispuesto a aceptar todo con tal de irse, el que no duda en quemar sus papeles, su identidad, con el fin de cambiar su destino y transformarlo en una empresa irreversible. Pero son, sobre todo, sus propias vidas las que se consumen en una lógica obsesionada entre la fatalidad y el juego, la violencia y la fe. “No hice un filme sobre la inmigración –dice la realizadora– hice un película sobre lo imaginario, sobre la espera y la tentación”.
Premios
Premio al Documental, Premio a la Primera Obra de la Guilde des Cinéastes Africains, FESPACO 2003; Premio Télémaques 2003 / 2004; Tanit d’Or Vidéo, Rencontres cinématographiques de Carthage 2004.